“En el play es que se goza”


Parte de ser dominicano es la afición por el béisbol. Esto se evidencia cuando se pasa un día en el estadio, con la convergencia de los fanáticos, los jugadores, los vendedores y las vivencias, se confirma que el play es mucho más que béisbol.

Desde las tempranas filas para adquirir las boletas que van desde los 50 hasta los 500 pesos, ya se puede ir estimando como serán los demás gastos.
Si llega a pie, calcule la “voladora”, pero si llega en su vehículo acuérdese del parqueador. “Venga por aquí”, le indica, con el signo de pesos en los ojos. Sume a su cuenta de 20 a 40 pesos, según la “amabilidad”.

Ya dentro del parque, vendedores por doquier le ofrecen desde una menta hasta una lata de cerveza.

Entre las comidas que la gente más pide están los pedazos de pizza ($80), las empanadas ($50), los refrescos ($50), las palomitas ($30), los hot dogs ($60) y las botellas de agua ($30).

También hay ofertas de pollo ($100), snacks ($40), frío-frío ($60) y diferentes tipos de tragos. Y mientras más cerca del terreno esté sentado, mejores serán las atenciones de los vendedores.

En el play, todas las edades y diferentes estratos sociales convergen para disfrutar de la actividad deportiva. Pero cabe destacar que no es lo mismo ir solo que acompañado.

Si le pregunta a un fanático cuánto cuesta ir al play, probablemente le conteste: depende con quien vaya. Por eso es común ver que algunos asistan sin compañía.

PROMOCIONES.
La excusa de un juego es la carnada perfecta para algunos promotores que aprovechan el flujo de personas para ofrecer sus productos, regalan chicles, mentas o “bam-bam” para aplaudir “en nombre del equipo” y de la compañía.

Si al pasar la cuenta, descubre que una noche en el play le pude salir hasta en 500 pesos por persona, y eso si es muy medido, ¿por qué no escoger opciones menos costosas?

Carlos Delgado, liceísta de corazón, lo explica.“Disfrutar del juego en el play no es lo mismo que verlo desde la casa, la emoción es distinta, sólo el que viene sabe lo que se goza”.

No es lo mismo ver el juego en vivo que por televisión. Eso es algo que dan por sentado quienes frecuentan el play.

“Es chulo hacerle bulla a tu equipo, verlo en el terreno, aquí uno se siente parte del juego”, dice Stephanie Cruz, quien frecuentemente asiste a apoyar a su equipo.

OTROS ATRACTIVOS.
Entre un ¡Licey, campeón! y un “tiene mieo”, las chicas aprovechan el pasillo central y circulan como en una pasarela.

Y como si se tratara de un espectáculo, algunos jugadores piden fragmentos de sus canciones favoritas, para que antes de salir al terreno la fanaticada intuya quien va al bate.

No faltan las voces de los narradores que describen con entusiasmo las acciones de los equipos.

Las discusiones entre fanáticos de un equipo y otro son infaltables, siendo parte de la emoción que genera el juego.

La música se pierde entre la algarabía por una buena jugada.

Y en los recesos, el ánimo lo ponen las bailarinas de cada equipo, que con creativos arreglos a canciones tradicionales, hacen porras para su conjunto.

Va pasando una entrada y otra, el público que hace una ola de aplausos o vocifera. Luego el juego finaliza e inicia desde las gradas una gran estampida.

Comienza el trabajo de quienes limpian y preparan todo para la próxima cita.

Unos van a sus casas con la alegría del triunfo y otros con la esperanza de que en la próxima su equipo sea el que gane.


Otros escenarios para disfrutar del béisbol

Los “colmadones”, los billares, las bancas , los sitios de “juntadera con los panas” o simplemente frente al televisor en su casa siguiendo las distintas cadenas de los equipos, son parte de las opciones que pueden permitirle disfrutar el juego fuera del estadio.

Santo Domingo, Santiago, San Francisco de Macorís, La Romana y San Pedro cuentan con estadios para ver el juego en vivo, pero también con lugares donde se intenta recrear las emociones del play.

En Santo Domingo algunos comercios crean el espacio propicio con pantallas gigantes para que los clientes puedan disfrutar del partido. Dentro de los más populares están: El Hangar (Avenida Independencia), Gameworks (Megacentro), La Terminal y La Base (ambas en la Av. España).

También en los colmados Los Dumé, El Linconazo (Av. Abraham Lincoln), Eagle (Autopista San Isidro) y el Casino del Hotel Jaragua (George Washington).

Santiago también cuenta con espacios como Stop One (Las Carreras), Ahí Bar, Bolívar Fría (Ensanche Bolívar), Dennis Car Wash (27 de Febrero).

En San Francisco de Macorís se pueden ver en El Colmadón (Av. Antonio Guzmán), Still Brit y El Tanque (ambos en la calle Manuel Ma. Castillo) San Pedro de Macorís cuenta con Out 28 y Karimar (Gaston F. Deligne).

En La Romana, en los alrededores del Francisco Michelli están las principales opciones para disfrutar del juego fuera del estadio.

Y si prefieres disfrutar del partido en la comodidad de tu hogar, puedes aprovechar las transmisiones por la televisión local.
Las televisoras que transmiten los juegos son CDN (canal 37), Digital 15 (canal 15), RNN (canal 27), Antena 21 (canal 21, Coral (canal 39) y CERTV (canal 4).

Así puedes compartir con amigos y familiares, inventarte un “cocinao”. En fin, en su espacio, puede crear el ambiente de acuerdo a sus gustos y preferencias. Y disfrutar de alternativas donde la inversión sea menos costosa.

Listin Diario, Domingo 11 de Noviembre 2007

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